Jesús dijo a sus discípulos: «Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os odien, bendecid a los que os maldigan, rogad por los que os difamen (…). Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis?».
Comentario del Evangelio
Hoy, escuchando a Jesucristo, comprobamos que Él no estaba en contra de la Ley de Moisés. Jesús —como verdadero Maestro— nos enseña a cumplir profundamente la Ley de Dios: el amor auténtico no calcula quién es (o no es) mi enemigo, mi prójimo, mi… Esto era lo que hacían algunos fariseos: vivían “calculando”…
—El Corazón de Dios ama siempre, aunque sea incomprendido.