Se enteró el tetrarca Herodes de todo lo que pasaba, y estaba perplejo; porque unos decían que Juan había resucitado de entre los muertos; otros, que Elías se había aparecido; y otros, que uno de los antiguos profetas había resucitado. Herodes dijo: «A Juan, le decapité yo. ¿Quién es, pues, éste de quien oigo tales cosas?». Y buscaba verle.
Comentario del Evangelio
Hoy estamos ante otro personaje que busca al “dios-payaso”. Tenía sus inquietudes… Pero no superaba el nivel de la curiosidad esotérica. ¡Algo muy actual! Empanada mental total.
—¡Buscaba verle! ¿No sería mejor “seguirle”? Cuando uno no ve al prójimo (porque lo mata, lo pisotea, lo critica, pasa de él…) tampoco ve a Dios.