«Ahora, Señor, puedes, según tu palabra, dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han visto mis ojos tu salvación».
Comentario del Evangelio
Hoy escuchamos las palabras del anciano Simeón. Estamos en el Templo de Jerusalén. María y José llevan al Niño —con sus 40 días— para presentarlo al Señor. Ahí se encuentran con Simeón. Él toma en brazos a Jesús y se siente totalmente feliz: no echa en falta ya nada más de este mundo, porque “quien a Dios tiene nada le falta”.
—Dios ha venido al mundo. ¡Y tú lo sabes! ¿Por qué te quejas cuando crees que te falta algo?