Jesús dijo a sus discípulos: «No os amontonéis tesoros en la tierra, donde hay polilla y herrumbre que corroen, y ladrones que socavan y roban».
Comentario del Evangelio
Hoy Jesús nos da un consejo muy práctico: no tomar las cosas de esta vida como un tesoro. Tendemos a acumular muchas cosas que al final no sabemos dónde ponerlas. Es cierto que necesitamos cosas para vivir, pero lo que nos hace falta sobre de todo es amor. Algún día Dios nos llamará al cielo: ¿qué tesoros me encontraré allí?
—¡Fíjate!: Jesús se ha quedado en la tierra, escondido en la Eucaristía. Está presente en muchas iglesias. ¡Está en todas partes! ¿Podría hacerlo si tuviera muchas cosas?