15 de octubre: Santa Teresa de Jesús, virgen y doctora de la Iglesia
Texto del Evangelio Mt 11,25-30
Jesús dijo: «Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios e inteligentes, y se las has revelado a pequeños. Sí, Padre, pues tal ha sido tu beneplácito».
Comentario del Evangelio
Hoy celebramos santa Teresa de Ávila (de Jesús) (1515-1582). Nace en Ávila (España), de padres virtuosos y temerosos de Dios, en el seno de una familia numerosa. Todavía niña, cuando tiene menos de 9 años, lee las vidas de algunos mártires que le inspiran el deseo del martirio, hasta el punto de que improvisa una breve huida de casa para morir mártir y subir al cielo. A la edad de 20 años, entra en el monasterio carmelita de la Encarnación, también en Ávila. El descubrimiento fortuito de la estatua de «un Cristo muy llagado» marca profundamente su vida. Muere en Alba de Tormes.
—«Nada te turbe / nada te espante; / todo se pasa. / Dios no se muda; / la paciencia todo lo alcanza; / quien a Dios tiene / nada le falta / ¡Sólo Dios basta!» (Santa Teresa de Jesús).