23 de septiembre: San Pío de Pietrelcina, religioso
Texto del Evangelio Mt 11,25-30
Tomando Jesús la palabra, dijo: «Mi yugo es suave y mi carga ligera».
Comentario del Evangelio
Hoy celebramos a un santo moderno y muy popular. El Padre Pío (1887-1968), franciscano, era famoso por el don de los “estigmas”: cuando tenía 31 años, le aparecieron en las manos y en el costado las mismas heridas de Jesús crucificado. Hasta pocos minutos antes de su traspaso al cielo, el Padre Pío llevó pacientemente estas “llagas”: las manos agujereadas, sangrando. Justo antes de morir, le desaparecieron completamente. Fue un modo peculiar de participar en la Pasión de Cristo.
—Pero san Pío de Pietrelcina imitó a Jesucristo, sobretodo, con su vida de entrega generosa a los demás, especialmente administrando el sacramento de la Penitencia y dedicando muchas horas a rezar.